¿Puedo disfrutar del sol con un cáncer de mama?

En nuestro último blog os contábamos algunas de las precauciones que hay que tener en cuenta al disfrutar de las vacaciones cuando se está en tratamiento por un cáncer de mama. Uno de los grandes protagonistas este mes es el sol, por ello le hemos querido dar una mención especial.

La importancia de protegerse frente a los efectos nocivos de la radiación solar ha aumentado considerablemente, especialmente en las personas que se encuentran bajo tratamiento oncológico.

Es cierto que al someterse a quimioterapia o radioterapia, se presentan ciertos condicionantes en la piel que exigen extremar las precauciones en el momento de exponerse al sol, pero esto no significa que no puedas hacerlo.

Algunas de las medidas que se deberían tener en cuenta son:

• Se debe evitar las horas centrales del día, cuando la radiación solar es más fuerte.
• Es importante estar bien hidratado/a.
• Imprescindible utilizar cremas solares que ofrezcan una protección solar total.
• La crema solar hay que aplicarla antes de la exposición al sol y renovarla frecuentemente para evitar el riesgo de dejar zonas de la piel sin cubrir.
• No se pueden olvidar las protecciones físicas como: gorro, gafas de sol, incluso guantes.

En caso de estar recibiendo quimioterapia, algunos de los medicamentos pueden aumentar la sensibilidad a la luz solar, generando incluso quemaduras intensas en la piel. Esto no significa que no se pueda estar al aire libre, pero mejor cubriendo el cuerpo con prendas sueltas, sombrero y crema solar.

Si en tu caso estás recibiendo radioterapia, la zona tratada está enrojecida por lo que es recomendable cubrirse con alguna prenda cuando salgas al exterior.

En importante acudir al médico para que en cada caso concreto, te recomiende lo mejor para tu situación y tratamiento.

¡Esperamos que estos pequeños consejos te ayuden para seguir disfrutando del verano!